Aunque el fin de semana, el exgobernador de Puebla, Mario Marín Torres, quedó en libertad deberá seguir desde su hogar el proceso por el delito de tortura en contra de la periodista y escritora Lydia Cacho.
Tras haber ganado un amparo, las medidas cautelares cambiaron, por lo que desde el sábado pasado salió del penal del Altiplano, donde estaba recluido hace tres años.
Al respecto, el gobernador electo de Puebla Alejandro Armenta Mier dejó en claro que se trata de un tema de orden judicial y federal, y las resoluciones competen estrictamente a ese poder.
Aseguró no tener injerencia en este caso jurídicos, que además no se resuelve con opiniones particulares.
“Soy gobernador electo no ministerio público, ni juez, ni pertenezco a la Suprema Corte de Justicia de la Nación, ni tengo representación en el Poder Judicial por lo tanto no puedo atender un tema que no es de mi competencia”, precisó
Respecto a la periodista Lydia cacho externó su respeto y admitió que en este momento está enfocado en el proceso de transición del gobierno estatal.